Sitges 2017: Blade of Inmortal
Takashi Miike, es uno de los habituales e imprescindibles del Festival de Cine de Sitges, y aunque no siempre es una buena noticia (quizás debería replantearse rodar menos películas y que fuesen de más calidad), en esta ocasión el resultado es bastante bueno, ofreciendo una adaptación bastante conseguida del manga de La Espada del Inmortal.
Tras la muerte de su hermana, Manji obtiene el poder de la inmortalidad de una misteriosa anciana. Mientras viaja, conocerá a Rin Asano, una niña cuyos padres son asesinados por el liderado por Kagehisa Anotsu. En esta venganza, Manji luchará contra una serie de personajes a cual más peculiar.
La Espada del Inmortal es a nivel visual una gozada. Las peleas, como suele suceder en las películas de Miike están muy bien rodadas y muestran el gran gusto del maestro Miike por este tipo de escenas, pero ese es su mayor defecto, como suele pasar también en sus películas, y es que lo que al principio puede deleitarnos, alargado hasta la extenuación acaba por cansar. Ese es el único defecto que le he encontrado a la película, pero enturbia por completo el resultado final y deja un sabor de boca de hastío, cuando podría haber funcionado mucho mejor con un metraje más ajustado.
Una película recomendable si estás dispuesto a darte una bacanal de peleas y sangre, aunque hay que tener cuidado con el empacho.
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