La Favorita ( The Favourite)

La nueva película de Yorgos Lanthimos está recibiendo unas críticas sorprendentes, y no solo eso, sino que además es una de las grandes favoritas para esta edición de los Oscars, algo que parecía una locura hace tan solo unos años, por lo que no tenía demasiado claro que esperar de La Favorita. ¿Ha cambiado tanto su discurso Lanthimos para que la academia se atreva a nominarla como mejor película? Pues la respuesta es si pero no.

La reina Anne vive junto a su inserparable amiga Lady Sarah en unos tiempos complicados para el reino, cuando aparece Abigail, una joven familia de Lady Sarah y que busca un lugar para huir de la pobreza. Poco a poco se irá ganando la confianza de la reina hasta competir por su amistad sin importar de que manera.

Lanthimos ha apostado por una película con una trama mucho menos complicada que en sus anteriores propuestas, pero ni mucho menos ha hecho con La Favorita una película accesible para todos los públicos, simplemente ha eliminado la barrera del absurdo que puede tirar para atrás a los menos acostumbrados a este tipo de cine.

Pocas pegas se le pueden poner a la película. Su fotografía es acertadísima, como suele ser en las películas de Lanthimos, con luz natural en muchas ocasiones, y con un tono frio e impersonal que le da ese punto peculiar en lo visual que tienen sus películas. La puesta en escena también es marca de la casa, con movimientos de cámara y distribuciones extrañas, pero que en ningún momento te sacan de la película.

Esta es una película al servicio de Rachel Weisz, Emma Stone y Olivia Colman

Pero por mucho que hablemos de las virtudes de la película, todas quedan eclipsadas por sus tres protagonistas, y es que esta es una película al servicio de Rachel Weisz, Emma Stone y Olivia Colman. Las tres actrices se comen la pantalla cada vez que aparecen, cada vez que hablan, son el mayor activo de la película y con ellas habría sido suficiente para aguantar la película si lo demás hubiese fallado. No puedo imaginar que dos de ellas no se lleven el Oscar a mejor actriz y secundaría, de echo el secundarío debería ser ex aequo para Stone y Weisz porque no es justo que una de ellas se quede sin recompensa.

También destacaría el papel de Nicholas Holt, que es otro de esos actores que no fallan nunca, pero aquí su papel queda muy lejos en protagonismo y su actuación aunque a un gran nivel como siempre, queda eclipsada y pasa bastante mas desapercibida.

Pocas cosas más puedo alabar de la que para mi es una de las claras favoritas a arrasar este año en la ceremonia de los Oscars 2019. Si aún no la habéis visto os aseguro que os estáis perdiendo una de las mejores películas del año.

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